Una historia sobre comunicación y las olas más grandes del planeta

Son muchas las veces que en comunicación soñamos con encontrar ese verdadero elemento diferencial que posicione a una marca frente a su competencia. Que la permita destacar y tomar protagonismo en la agenda de los medios. Pero no siempre es fácil. Y menos en esta nueva era de “homogeneidad” en los mensajes, donde casi todos los discursos suenan igual.

Por eso estos días me ha vuelto a llamar la atención la historia de una pequeña playa de la acogedora villa marinera portuguesa de Nazaré, que se encuentra a apenas 120 km al norte de Lisboa: la Praia do Norte. Se trata de un pequeño y bonito pueblo de pescadores que, aunque siempre ha tenido un evidente encanto turístico (gracias a su sorprendente ciudad baja o sus tradicionales jureles al sol), no fue hasta hace apenas nueve años cuando supo encontrar (y explotar correctamente) ese elemento diferenciador que lo ha convertido hoy en uno de los lugares más conocidos del planeta (Nazaré genera más de 21.700.000 resultados en Google y Praia do Norte más de 170.000.000).

La historia de Nazaré y su Praia do Norte cambió un día de otoño del mes de noviembre de 2011, cuando mostró al mundo algo que la hacía única. El surfista hawaiano Garrett McNamara descubre la que hasta ese momento era la ola más grande jamás surfeada: 23,7 metros (lo que viene a ser un edificio de más de ocho plantas) y la foto da la vuelta al mundo (hoy el récord anda ya por los 24,38 metros de Rodrigo Koxa, también en Nazaré).

Desde entonces han sabido hacer un muy buen trabajo de comunicación y marketing, tanto a través de las redes sociales, como de la atención a medios y televisiones de todo el mundo. La Praia do Norte se ha convertido en una de las mecas del surf extremo más conocidas del mundo, tiene su propio logo, se ha diseñado todo tipo de merchandising y el Fuerte de San Miguel, promontorio que se asoma a la playa, aloja hoy un museo que desde 2015 ha recibido ya más de 650.000 visitantes. Además, se han elaborado multitud de documentales sobre el profundo desfiladero marino que genera las monstruosas olas, así como sobre algunos de los momentos más célebres, como este de Red Bull y Maya Gabeira o el del director malagueño Pedro Temboury y su Shredding Monsters: Nazaré

Por otro lado, la World Surf League.com, la marca que agrupa a los mejores surfistas y competiciones del planeta, celebra ya allí una etapa del campeonato mundial de olas gigantes, la Nazaré Tow Surfing Challenge. Lo curioso de esta competición es que cada año se convoca entre el 1 de noviembre y el 31 de marzo y se espera la llegada de la mayor marejada de la temporada para confirmar fecha con 48 horas de antelación, consiguiendo aun así la asistencia de grandes estrellas, deportistas y medios, que viajan desde todo el mundo para estar allí. ¡Un poder de convocatoria envidiable!

En definitiva, en apenas diez años, hemos asistido a la creación y consolidación de la nueva marca Praia do Norte, que ha derribado fronteras y que (inteligentemente) ha sabido posicionarse entre las más importantes del mundo en su mercado. Ahí está ya por derecho propio entre las míticas Jaws (el monstruo de Maui), Pipeline (quizá la más mítica) y Mavericks (inmortalizada en la película Chasing Mavericks sobre la vida de Jay Moriarty).

Fotos por @praiadonortenazare